Y dio otro bocado y continuó inmerso en sus pensamientos ajeno a lo que sucedía a su alrededor. Hoy era su aniversario de boda, había preparado una cena sorpresa. Tras recoger en el restaurante su comida china preferida, pasaría a buscarla e irían hasta al parque, a un lugar que tras varios paseos le había parecido perfecto. Oía voces de fondo, pero su cena era más importante, le habían diagnosticado cáncer unos días antes, no sabía qué tipo de cáncer, pero no había tenido valor para contárselo. Hoy lo que único que deseaba es que todo saliese perfecto.
Vivir con un secreto como ese, uyyy no!!, q bonito q a pesar de los problemas se esfuerze por una cena perfecta.
ResponderEliminarSalu2
Que bonito! y que duro a la vez!... supuestamente debería ser uno de los días más felices de tu vida y resulta que nunca podrás completarlos porque tienes un secreto que sabes que dolerá en el alma.
ResponderEliminarPrecioso, en serio, sigue así!
Abrazos
Paloma